Se dice que el mago Merlín usó un cuerno de unicornio para hacer un agujero en su cámara oscura y se proyectó una imagen al otro lado de la caja.
Fue a raíz de la proyección que los científicos comenzaron a investigar cómo fijar esa imagen y poder conservarla durante mucho tiempo. Desde el siglo XVI se han llevado a cabo numerosas investigaciones y gracias a ellas hoy podemos disfrutar de la fotografía como recuerdo de algo que ya fue.
Todas las cámaras, desde la primera que se inventó, tienen un sensor. A lo largo de los años ha ido evolucionando, pasando de ser una hoja de papel muy receptiva a la luz, pasando por el film (el rollo) también de este tipo de material, hasta el digital, un chip muy complejo con componentes de gran calidad. sensibilidad. Sin embargo, cuando vemos que nuestras cámaras tienen un sensor CCD o CMOS, nos quedamos confundidos sin saber realmente qué significa o cuál es la diferencia.
Sin que te rompas la cabeza, vamos a resumir las características de cada uno y así entender qué hace que un sensor sea diferente de otro. Por un lado está el CCD (Charge Coupled Device o, en español, Coupled Charge Device). Este tipo de sensor se encuentra en la mayoría de las cámaras digitales y significa que:
– Es sensible a la luz y funciona como líneas de píxeles con una cobertura de colores primarios (RGB).
– Es más sensible a la luz que el CMOS.
– Consume más energía, por lo que la batería puede agotarse más rápido.
– Captura una gama más amplia de tonos (luces, medios tonos y sombras) en las fotos.
Por otro lado, el sensor CMOS (Complementary Metal Oxide Semiconductor o, en español, Semiconductor Complementario de Óxido Metálico) se encuentra en las cámaras más actuales y en la mayoría de las profesionales. Sus características son:
– Mejor rendimiento en una estructura más sencilla, sin necesidad de más equipamiento.
– Menos sensible a la luz, pero mucho menor consumo de energía, por lo que las cámaras son más económicas.
Así que resumiendo estos puntos te indicaremos las ventajas de uno sobre el otro:
a) Los sensores Los CCD crean imágenes de alta calidad con bajo ruido digital; Los sensores CMOS son más sensibles a él.
b) CMOS consume menos energía; un sensor CCD puede consumir hasta 100 veces más energía que un CMOS; esto hace que la batería dure más en una cámara con este tipo de sensor.
c) El tiempo que se tarda en hacer una foto y verla es más rápido en las cámaras con CMOS.
d) En realidad, ninguna es mejor que la otra, simplemente son sensores que brindan características diferentes a cada una de las cámaras digitales. La tecnología actual ha hecho que el sensor CMOS (en teoría, inferior al CCD) se acerque a una calidad muy similar al CCD de manera que, para el ojo humano, las diferencias son casi imperceptibles.
Tenga en cuenta todo lo anterior al comprar una cámara digital. Recuerda que estamos para guiarte y hacer que cada uno de tus pesos valga la pena.